La juventud matancera marcha por el Apóstol |
Por
Eduardo
El
mes de enero, del recién estrenado 2013 estuvo pletóricamente lleno de
acontecimientos de gran relevancia. Se celebraron las Cumbre CELAC – Unión
Europea, la cual en mi opinión nada aportó a nuestros pueblos, y la de la CELAC
propiamente hablando, que si tuvo relevancia para América Latina. De la primera
me resultaron extremadamente chocantes, las palabras del Presidente de Chile,
Sebastián Piñera, hablando de una supuesta recuperación de la economía europea,
y su defensa de la necesidad de que los pueblos tengan que soportar las medidas
de choque neoliberales, mientras los ricos, y los políticos corruptos, como la
cúpula del Partido Popular, se enriquecen a costa del pueblo trabajador.
El
misterioso debate a puerta cerrada, contraviniendo la costumbre latinoamericana
de sostener en público las discusiones de las cumbres, más el nada superado
lenguaje eurocentrista y colonialista de los representantes de la UE en sus
discursos, me permite en mi opinión asegurar, que los latinoamericanos y
caribeños podríamos bien habernos ahorrado el convite con la culta y vieja
Europa.
De
la Cumbre nuestra, la de los pueblos de Nuestra América al decir de Martí, solo
mencionar el hecho de que en ella, con el nombramiento de nuestra Patria, y de
nuestro General Presidente Raúl Castro, para la Presidencia Pro Témpore de la
CELAC, nuestro pueblo recibió un reconocimiento a sus 54 años de defensa de su
soberanía nacional, y de las causas más nobles de los pueblos del Tercer Mundo.