Anónimo:
Si yo fuera tú me indignaba y escribía
acerca de cómo los productores de leche europeos botan en los campos miles y
miles de litros de leche. ¿Por qué no hablas de que la conviertan en leche en
polvo y la envíen a Etiopía, o a Somalia, y por qué no, a Cuba. Eso es el
capitalismo compatriota equivocado, además de tu refrigerador lleno de carne.
Yo lucho porque no solo tu hijo, sino el de todos los padres del mundo tengan
la posibilidad de al menos algún día ofrecerles a sus niños un pedazo de carne.
La posibilidad de un mundo mejor, que yo y muchos otros creemos posible, nunca
perecerá mientras exista Cuba Socialista.
En pleno Período Especial, Fidel dijo que
la principal misión internacionalista de los cubanos era salvar la Revolución,
porque el día que ella cayera, Estados Unidos como previó Martí eliminaría todo
vestigio de la independencia de los países latinoamericanos. Y resistimos, y
después llegó Chávez, y después Lula, y después Tabaré, y Evo, y los Kirchner,
en fin que estamos como decía Martí en el camino de la segunda y total
independencia.