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| Estudiantes de la Universidad de Matanzas |
Por
Eduardo
El
gobierno de los Estados Unidos destina grandes partidas de dinero del
contribuyente norteamericano a financiar la labor de subversión ideológica en
contra de la Revolución Cubana. Las cantidades de dinero entregadas a los
grupúsculos contrarrevolucionarios se incrementan con cada administración estadounidense.
Si en los dos períodos de Clinton, la cifra alcanzó 8 millones de dólares, en
los dos períodos de la administración de Bush el financiamiento se incrementó
hasta un total de 116 millones de dólares.
En
los cuatro años correspondientes al primer período de la administración de
Obama, el Gobierno Federal entregó un total de 124 millones de dólares para el
financiamiento de la subversión del orden político y del sistema socialista en
Cuba. Si antes el financiamiento a la subversión se ejecutaba de manera
secreta, a través fundamentalmente de la Agencia Central de Inteligencia, hoy
se hace de manera pública y las partidas de financiamiento se publican en el
sitio Web oficial de la Agencia de las Estados Unidos para el Desarrollo (USAID
por sus siglas en inglés).
