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La foto de María Mantilla que llevaba el Apóstol |
Por Eduardo
Le informo Señor mío que la carta inconclusa a Manuel Mercado fue parte del trofeo de guerra, que
conjuntamente con otras propiedades del Apóstol, se ocuparon a su cadáver
después de su heroica caída en combate. El Teniente Coronel Ximénez de Sandoval
entregó a las autoridades en Santiago de Cuba las pertenecías de Martí que pudo
recuperar, entre las que se encontraba su leontina, su fusil Winchester, una
foto de María Mantilla empapada con su sangre, su revólver y documentos entre
los cuáles se encontraba la carta inconclusa a Manuel Mercado. Otras como 500
dólares en oro norteamericanos que llevaba el Maestro fueron saqueadas.
El inseparable colaborador y albacea de Martí, Gonzalo de Quesada y
Aróstegui publicó la carta inconclusa a Mercado en la primera edición de las
obras de Martí, a inicios del siglo XX, tomándola del facsímil que, a su vez,
había reproducido el oficial y escritor y capitán español Enrique Ubieta en su
libro cronológico sobre la Revolución Cubana. Según expresa este autor, quien
se declaraba asimismo “amigo de Martí”, la había recibido de manos del General
Salcedo, entonces jefe de la plaza de Santiago de Cuba. Su original se
considera hoy desaparecido.