Tarja que conmemora el inicio del incendio de Bayamo. Foto tomada del Blog El Diwan |
Por Eduardo
Anónimo:
La historia de muchos de los revolucionarios cubanos por
tradición es la de un grupo de hombres ricos de cuna que lo abandonaron todo
para irse a luchar por la libertad, como Céspedes, Aguilera, Agramonte, Maceo
Osorio, Eduardo Machado, Moralitos, y otros dueños, de haciendas y vidas que
por libertar a la Patria
lo dieron todo, hasta su propia vida, y afrontaron la misma vida de sacrificio,
que aquellos que los siguieron, persiguiendo el sueño de una Patria Libre.
Cuentan que cuando le preguntaron un grupo de patriotas a
Francisco Vicente Aguilera durante el incendio de Bayamo: - Don Pancho
¿Quemamos su casa también?; el Primer Vicepresidente de la República de Cuba en
Armas expresó; - Claro, yo nada tengo, si no tengo Patria.
Fidel y Raúl son de esa estirpe de hombres, hubieran podido,
desde su posición de hombres adinerados, haber hecho con sus vidas lo que
quisieran. Prefirieron, entregarlas a la causa de los humildes y los
desposeídos, seguir los caminos inciertos y plagados de sacrificios de la Revolución Social.