sábado, 19 de octubre de 2019

Alicia en el corazón de Cuba.

El renovado teatro Sauto, de Matanzas,
acogió la primera función en homenaje
a Alicia Alonso.
Foto: Ismael Francisco/ Cubadebate.

 Por Eduardo

Mientras miro pasar en la pantalla de mi televisor la larga fila de compatriotas que desfilan ante el féretro de la Prima Ballerina Absoluta, nuestra Alicia Alonso, pienso que no existe hoy otro tema sobre el cual debiera escribir, que rendirle mi tributo de cubano agradecido a quien supo cómo nadie situar el nombre de nuestra Patria en los más altos altares del arte universal.
Miguel Cabrera, historiador de la emblemática compañía insignia de la danza en Cuba, desde los estudios de la Televisión, nos entrega un sinnúmero de anécdotas que nos dibujan la dimensión humana de este ser excepcional que hoy nos abandona físicamente, pero que permanecerá por siempre entre nosotros, fundamentalmente por el legado que nos regaló; que no es otro que la Escuela Cubana de Ballet y su expresión más acabada, el Ballet Nacional de Cuba.