Por Eduardo
El VII Congreso da continuidad a las transformaciones relacionadas con la actualización del modelo económico y social proyectado en el anterior VI Congreso, y en tal sentido evaluó la implementación de los Lineamientos de la política económica y social del Partido y la Revolución aprobados en el mismo.
En el Informe Central, el General de Ejército Raúl Castro, identificó a la mentalidad obsoleta como el principal obstáculo para la implementación de los mismos, sobre todo enfatizó entre los comportamientos derivados de esta la falta de preparación, exigencia y control, así como la poca previsión de cuadros y funcionarios encargados de llevar a cabo diferentes tareas.
Algo que quedó ratificado en el Congreso fue que la construcción del socialismo en Cuba no implicará jamás el sacrificio de nuestra soberanía, ni las riquezas del país, el bienestar y la seguridad de nuestro pueblo. Se ratificó como garantía de la independencia nacional que en nuestra Patria habrá un solo Partido que represente a todos los sectores y estratos del pueblo cubano, dentro del cual deberán primar la diversidad, la activa participación y un amplio debate e intercambio de opiniones entre los militantes y el pueblo en general.
El Congreso se pronunció asimismo en lo referente a la política de cuadros a elevar los niveles de promoción a las diversas responsabilidades a mujeres, jóvenes, negros y mestizos a puestos decisorios y la creación de una reserva de cuadros que asegurará la renovación de los cargos de dirección en el Partido, el Estado y el Gobierno. Dentro de esta política el Congreso aprobó como límite para ingresar al Comité Central la edad de 60 años, y ratificó como límite de tiempo para ocupar una responsabilidad un máximo de dos períodos de 5 años. El propio Congreso, con la elección del Comité Central y el Buró Político, dio un ejemplo al resto de la nación de renovación del mandato para la propia organización política.
La discusión de los cuatro documentos base del Congreso del Partido, la cual transcurrió en un ambiente de franco y democrático debate, no culminó en el propio Congreso, sino que por acuerdo del mismo se orientó el estudio de los mismos y su debate con todos los militantes del Partido, la UJC, las organizaciones de masas y de todo tipo que componen nuestra sociedad civil socialista, y el pueblo en general.
Este en mi opinión es el acuerdo más importante del Congreso, porque ratifica que el Partido Comunista de Cuba nunca adoptará ninguna decisión política o de otra clase sin que no haya existido primeramente un proceso de amplia consulta popular. La discusión de los documentos del partido es una muestra fehaciente de la Democracia Socialista Participativa muy superior en todos los órdenes a la Democracia Representativa Capitalista y neoliberal que los grandes centros de poder quieren imponer al reto del mundo como una panacea universal.
y como es continuidad Edu, seguiremos igual que con el anterior, sin ir a ningun lado y sin resolver ningun problema y cada dia las cosas peor. y tu aplaudiendo y apoyando.
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