Soberana 01, un logro de la ciencia cubana.

 

(Foto Cubadebate)

Por Eduardo

Mi amigo el Jimmy, en su arduo batallar en las redes sociales en defensa de la Revolución, ha encontrado un vocablo para referirse a los seres humanos nacidos en esta tierra que tratan de descalificar los avances de la Cuba Socialista. Él los llama “los odiadores”. Como es de suponer la palabra de marras deriva de la capacidad de estos señores de destilar un odio visceral contra todo lo que se relacione con los avances que en cualquier esfera alcance nuestra Patria.

Se declaran seguidores de las sacrosantas ideas de la democracia, siempre y cuando esta tan llevada y traída palabra no tenga nada que ver con las idea socialistas y comunistas; como si las bases ideológicas de la Revolución Cubana no fuesen el resultado de los más de 152 años de duro batallar de la nación cubana por su independencia y autodeterminación.

Como se expone en el preámbulo de la Constitución de la República de Cuba, aprobada en referendo nacional por el voto favorable de 6 millones 816 mil 169 electores, que representa el 78,30 % de la lista actualizada y el 86,85 % de los electores que votaron, los cubanos avanzamos en la construcción de socialismo guiados por “lo más avanzado del pensamiento revolucionario, antiimperialista y marxista cubano, latinoamericano y universal, en particular por el ideario y ejemplo de Martí y Fidel y las ideas de emancipación social de Marx, Engels y Lenin”.

Sin embargo, la historia reciente demuestra que a un proceso político o revolucionario no le basta con poseer una fuerte base de apoyo popular. Los recientes sucesos en Belarus, donde el actual presidente Alexander Lukashenko acaba de ganar las elecciones con más del 80% de los votos, demuestran que la nueva táctica imperialista, ya empleada en la América Nuestra en el golpe de estado en la hermana Bolivia, consiste en desconocer los resultados electorales de los partidos y movimientos que no responden a los intereses hegemónicos de los que se creen amos del mundo. Ya se anuncia la aplicación de esta macabra táctica a las elecciones parlamentarias en la República Bolivariana de Venezuela, y en las presidenciales que tendrán lugar en la Nicaragua Sandinista.

En los países donde se avizora un debacle en las urnas de la derecha entreguista, como son los casos de Bolivia y Ecuador, donde los aliados del imperio accedieron al poder valiéndose de la traición y el golpe militar respectivamente, la reacción trata por todos los medios de demorar o entorpecer las elecciones. Tanto el gobierno de Lenín Moreno (con tilde para que no se confunda con Lenin), como la de la mestiza de india teñida de rubia autoproclamada, han prácticamente destrozado las economías de esos países cuyo desempeño económico en las dos últimas décadas fueron un ejemplo de éxito, con crecimientos del 4% del PIB como promedio, lo cual sumado a un gran número de políticas de inclusión social desarrolladas por los gobiernos de izquierda, elevaron los índices de desarrollo humano de esas naciones.

Sin embargo en estos tiempos como dice un viejo refrán cubano, “no basta con ser bueno, sino hay que parecerlo”. La maquinaria mediática al servicio de los intereses de la gran potencia hegemónica, lo cual incluye a los medios de desinformación masiva en manos de las oligarquías locales entreguistas en todo el planeta, ocultan los logros de los países atacados, maximizan los problemas y satanizan a los gobiernos que no son del agrado del equipo que hoy gobierna la Nueva Roma. En el caso de nuestra Patria, el equipo de odiadores, nada más que reciben la instrucción de sus jefes, salen en manada en las redes sociales a atacar sin misericordia a cuanto enaltezca el prestigio mundial de la nación cubana.

La reciente noticia de que Soberana 01, el candidato vacunal cubano para prevenir el contagio con el SARS-CoV-2, entra en fase de ensayos clínicos a finales de agosto y que los resultados del estudio estarían disponibles en febrero próximo, desde su publicación ha comenzado a recibir ataques furibundos y descalificaciones de parte de los que al servicio del imperio, pululan por las redes sociales. Ellos que se declaran los defensores de la cubanidad, no rebozan de orgullo patrio ante este logro de la ciencia cubana que coloca a Cuba entre el grupo de países que hoy desarrollan vacunas contra el virus que causa la COVID-19 y han emprendido la fase final de sus proyectos.

Ayer 20 de agosto de 2020, el programa Mesa Redonda invitó a los científicos cubanos que lograron desarrollar en solo tres meses cuatro candidatos vacunales, de los cuales Soberana 01, el más avanzado de los desarrollados por nuestros científicos, es el candidato vacunal número 30 que recibe autorización de ensayo clínico en el mundo, en una carrera de más de 200 proyectos en varios países. Menos del 20% de los proyectos en el mundo han logrado el autorizo de ensayos clínicos. La información brindada por nuestra televisión es bien clara de cómo se van cumpliendo en nuestro país todas las etapas para que en febrero de 2021 el proyecto vacunal se convierta en un producto acabado y certificado.

Misteriosamente, y sin entrar en muchos detalles, la información sobre el candidato vacunal cubano Soberana 01 ha recibido el mismo tratamiento mediático del candidato vacunal ruso Sputnik V. Los medios masivos de desinformación y muchas plataformas en la red de redes; o tratan de ocultar el logro de la ciencia cubana, o descalifican la cientificidad del mismo. Ante esta situación yo no puedo más que pensar en lo que el desarrollo de una vacuna cubana para enfrentar la COVID-19 traería consigo para los planes de los que sueñan desde hace años con destruir a la Revolución Cubana. A aquellos que un día soñaron ver nuestras calles repletas de ataúdes, nuestras terapias intensivas desbordadas, las funerarias en la isla repletas de cadáveres, la Cuba solidaria responde con el trabajo entregado de nuestras mujeres y nuestros hombres de ciencia, orgullos de la nación cubana.

Viene a mi mente la premonitora frase de nuestro Comandante en Jefe Fidel Castro Ruz, cuando afirmó un día que el futuro de nuestra Patria, tendría que ser necesariamente un futuro de hombres de ciencia. A la visión premonitoria de Fidel, que en medio de una etapa tan dura para la historia de nuestro país como fue el Período Especial, impulsara el desarrollo del Polo Científico con sus más de 10 grandes centros de investigación de nivel mundial, y la industria de producción de medicamentos Biocubafarma, que nos garantiza la soberanía en la producción de medicamentos para nuestro pueblo, debemos los cubanos hoy rendirle tributo y homenaje. Creo que hoy Fidel, disfrutaría como nadie este gran logro de la medicina y la ciencia cubana.

Estoy seguro que en caso de lograr la vacuna contra la COVID-19, nuestro Estado y Gobierno la pondrían a disposición del resto de la humanidad. Los hermanos de todos los países del Tercer Mundo, estoy seguro de ello, no esperan de nuestra Patria otro comportamiento que la globalización de la solidaridad. En este mundo mayoritariamente capitalista, donde las grandes empresas farmacéuticas se preparan para alcanzar grandes dividendos con la venta de las vacunas contra la funesta enfermedad, una vacuna cubana contra COVID-19 salvaría de la muerte a millones de seres humanos en todas las latitudes de este planeta.

No importa que los odiadores pataleen, hasta el día de hoy 21 de agosto de 2020, en Cuba han enfermado de COVID-19 un total de 3565 personas y han fallecido 89 personas. Para la población cubana de 11 221 060 habitantes estás cifras equivalen al 0,003% de enfermos y el 0,0007% de fallecidos con respecto a su población total. En los Estados Unidos de América para esta misma fecha han enfermado 5 590 000 ciudadanos y han fallecido un total de 174 000 norteamericanos. Estas cifras equivalen para una población de 309 349 689 habitantes al 0,180% de enfermos y el 0,056% de fallecidos con respecto a la población de la Unión Americana.

Si este análisis lo desarrollamos para el Estado de la Florida que posee una población de 20 271 272 habitantes, el análisis porcentual demuestra que con un total de 589000 enfermos y 10048 fallecidos hasta el 21 de agosto de 2020, se han enfermado el 0,29% de sus ciudadanos y han fallecido el 0,049%. Si sabemos que en esta porción de territorio norteamericano radican los principales alabarderos de los ataques en contra de la Revolución Cubana, este humilde ñángara les recomendaría que como decía el redentor, no vean la paja en el ojo ajeno, cuando en el suyo propio tienen una viga. Este simple análisis estadístico demuestra, que quienes critican a nuestro gobierno están muy lejos de los resultados que en materia del manejo de la crisis pandémica han demostrado demostrar los que gobiernan Yumilandia y el estado vecino de Cuba.

Por último, y para finalizar el post, deseo felicitar a todos nuestros científicos implicados en el desarrollo del candidato vacunal Soberana 01 por su logro experimental, y desearles toda la suerte de este mundo en el éxito de las pruebas clínicas anunciadas. Que como reza la inmortal estrofa del Himno de Bayamo, “la Patria os contempla orgullosa”.

(Foto: Cubadebate)